1 de abril de 2008

Desilusión

Es un error enamorarse de la persona equivocada...
Porque el sufrimiento llega y la incertidumbre no se deja esperar.
Todo tu mundo cambia. Ya nada es igual.
Tus venas se tornan intransitables y los nervios no los puedes controlar.
No tienes fuerzas. Sientes con más intensidad los latidos de tu corazón
y el nombre de quien amas se convierte en una canción.
Sientes que las canciones de amor las escribieron para ti
y con regularidad intercambias papeles con los actores de alguna película
romántica.

Cuando te enamoras de una persona y no eres correspondid@
tus movimientos se tornan torpes y sin definición.
En tu mente hay un rejuego de encuentros informales...
Tantas cosas llegan a tu mente que tu concentración para pensar,
jugar y soñar se opacan, como se opacan las estrellas
a la llegada de nubes grises en una noche de lluvia.

Tus ojos en el horizonte, tu mente en el firmamento y tu corazón,
sangre y nervios en guerra hacen de ti un ser indefenso, débil e infeliz.

¿Qué podemos hacer?
El amor es como la luz del sol: nace un día y una noche se oculta.
Llega sin preguntar, pero nunca se va, sino que cambia de lugar.
El amor nunca muere, se oculta en el interior de tu corazón...
A veces se refugia tan profundo en ti, que no llegas a sentirlo,
pero siempre permanece ahí peregrinando en lo más hondo de tu ser
en la espera la persona indicada para seguir amando.

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